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Porco Rosso y la fascinación del cerdo

23 enero, 2016 /   5659

Es posible que Porco Rosso no sea la más popular de las películas de Miyazaki para algunos de sus fans, pero lo que es indudable es que lleva uno de sus sellos más personales: su protagonista es un cerdo.

A todos aquellos que les gusten las cintas de Studio Ghibli y sean seguidores de Miyazaki no les escapará que hay ciertos elementos que se repiten una y otra vez: la fuerza de sus protagonistas femeninas, la fuerte presencia de la naturaleza, la oposición a la guerra, los aviones, el mar o algún que otro cerdo.

La idea de metamorfosear a humanos en sus primeros hermanos los gorrinos no es tan descabellada ni mucho menos novedosa. Ya en el clásico la Odisea de Homero ocurre una escena que nos resultará familiar: los marineros de Odiseo/Ulises desembarcan en la isla Eea donde la hechicera Circe les invita a un banquete. Una vez se han atiborrado los transforma en cerdos. Saludemos a los predecesores de los padres de Chihiro.

Comer como cerdos

También vimos, por poner otro ejemplo, como en la película Willow el ejército y varios de los protagonistas, Madmardigan (Val Kilmer) y Sorsha (Joanne Whalley) entre ellos, eran convertidos en cerdos por otra hechicera, Bavmorda (Jean Marsh).

Su pasión por los cerdos es tal que incluso ha publicado un tomo en el que reimagina su película El viento se levanta en versión parcialmente porcina bajo el título: Kaze tachinu~Miyazaki Hayao no musou Comeback. También en su cómic Zassou Note salen cochinos por doquier.

Aunque no trabajó en él, la existencia del reino de Porcinia en el videojuego Ni no Kuni y sus habitantes disfrazados de cerdos durante gran parte del juego personalmente me parece un homenaje/guiño a Miyazaki. Si bien Studio Ghibli solo se encargaba de la parte artística y al ya retirado director no le gustan los videojuegos, Level-5 pudo pensar en el tirón que suponía para su juego asociarse al imaginario de sus películas.

Como sabemos, Marco Pagot, el protagonista de Porco Rosso, es víctima de un misterioso hechizo que lo transforma en cerdo, algo que no le supone especial inconveniente para seguir su vida con normalidad. De hecho, podríamos considerarlo un cerdo muy ligón dado su éxito con las féminas. Aunque va de camino a rescatar a unas niñas que han sido secuestradas, tiene tiempo para dedicarles unas piruetas con su nave a las señoritas de un hidroavión turístico. De hecho, en ocasiones se muestra orgulloso de su nueva forma y reniega de su antigua forma humana.

Más allá de la lista de humanos que han acabado convertidos en cochinos, engrosada por este piloto italiano combatiente durante la Primera Guerra Mundial; lo interesante es saber qué significado le otorga el maestro Miyazaki a estos animales y el motivo de su pasión por ellos.

Si algo ha distinguido al co-fundador de Studio Ghibli es su pensamiento independiente. Su noción de lo correcto e incorrecto nunca ha estado sujeta a ideologías, naciones o religiones. Ha cultivado su propia manera de ver el mundo a través de sus vivencias y del contexto en el que le ha tocado vivir y así lo ha transmitido en sus obras.

¿Por qué cerdos?, se plantea mucha gente. Antes esta pregunta a veces bromea y les contesta que simplemente son fáciles de dibujar. Lo que ve realmente en ellos Miyazaki es a nosotros mismos. No le importa que sea un animal con mala fama, él está por encima de las convenciones, lo que le gusta del cerdo es todo lo humano, tanto lo bueno o lo malo, que ve en él. No importa la forma, el valor de cada ser está en su interior y como diría el propio Porco Rosso: “Prefiero ser un cerdo a ser un fascista”.

Una curiosidad:

¿Ver a nuestro querido Porco Rosso comer spaguetti con bacon o bolas de carne podría considerarse canibalismo cerdil?

Os dejo un par de entrevistas muy interesantes para conocer mejor a Hayao Miyazaki:

http://www.angelfire.com/anime/NVOW/Interview1.html

http://www.midnighteye.com/interviews/hayao-miyazaki/#sthash.PNQqLI6x.dpuf